La consecución de derechos ha llegado en muchos casos tras intensas luchas políticas, algunos son gestos cotidianos, como ponerse unos pantalones. Otros, expresiones de derechos legales que las mujeres lograron tras largas batallas políticas.
Los derechos de la mujer han sufrido vaivenes históricos, avances y retrocesos, en el largo camino hasta llegar a la situación actual, que para muchos todavía está lejos de ser perfecta.
Con motivo quisimos hacer un repaso de algunas de las cosas que las mujeres no podían hacer hace años en la mayoría de los países occidentales y en la actualidad son considerados derechos en muchos de ellos.
Vestirse con libertad
«Cuando yo tenía 12 o 13 años y llegó la gran moda de los pantalones para las mujeres, mi mamá llegó un día a casa con dos. Pero mi padre le dijo que de ninguna manera se los podía poner, que en esa casa él era quien llevaba los pantalones».
Poeta nicaragüense Claribel Alegría, nacida en 1924
En las sociedades occidentales los pantalones eran una prenda masculina, y no fue hasta entrado el siglo XX cuando se empezaron a considerar apropiados para las mujeres.
«La relajación de las normas morales sobre el aspecto de la mujer en el mundo occidental no comenzó hasta los años 20 y 30 del siglo pasado en grandes ciudades como Nueva York o París, cuando se produjo un cambio en la representación de la figura femenina, sobre todo en las clases medias», dice Isabel Morant, profesora de Historia en la Universidad de Valencia y editora de la colección «Historia de las mujeres en España y América Latina».
Las mujeres empezaron a cortarse el pelo, a subirse las faldas, a salir a pasear solas…
Francia no abolió formalmente la obsoleta prohibición de usar pantalones en la capital, París, ¡hasta 2013!