Hay Chicas Almodóvar y madres Almodóvar. Las madres Almodóvar son sofisticadas, divinas, cosmopolitas, viven entregadas a su profesión, a ellas mismas, y han dejado a sus hijas en un segundo plano.
Son sofisticadas, glamurosas… priorizan su profesión a su vida personal, a su maternidad, a su hija. La maternidad no les hace sentirse realizadas; el éxito, sí. En Madres paralelas hay muchas maternidades y cada una tiene su armario. Muchos actores se apoyan en la ropa que llevar para crear su personaje y Pedro no deja nada al azar, diseña las prendas que llevan sus madres e hijas con la misma pasión que modela sus personalidades.
Becky del Páramo es la madre de Tacones lejanos y tiene un vestuario bárbaro. Becky es una madre paralela a Teresa, la madre que hace Aitana Sánchez-Gijón en la nueva cinta del manchego. El vestuario de Aitana es refinado, elegante, caro. No tiene nada qué ver con los vestuarios de Janis y Ana, los personajes de Penélope y Milena. Ambas llevan ropa de marca, pero no sus looks son más relajados, más urbanos, más ‘normales’… pero con mensaje.
Janis es fotógrafa de moda, pero no es una fashion victim. Milena lo ha tenido todo en la vida, menos el cariño de sus padres, algo que el dinero y la ropa cara no han conseguido compensar. Janis y Milena no son influencers, son madres.
Dice mi amiga Pepa que cuando tienes un hijo tu centro de gravedad se desplaza hacia él. Por eso las madres suelen dejar de pensar en ellas para hacer que la vida gire en torno a sus hijos. Dejan de interesarse por la moda, por las tendencias. Su máxima ahora es la comodidad. Han cambiado el bolso de la temporada por el carrito del niño.
Pero la moda sobrevuela la película. En Madres paralelas hay mucha moda: la que se fotografía en la revista, la que viste Milena para hacer la transición y borrar su género, la que lleva Janis para estar en casa.
El personaje de Penélope Cruz se mete en la cocina con una camiseta muy especial. Es blanca y lleva una frase impresa: WE SHOULD ALL BE FEMINIST. La lanzó Maria Grazia Chiuri cuando aterrizó en Dior.
Fue en 2016, año en el que transcurre la película de Almodóvar. Es ya una prenda icónica y Penélope la lleva, no porque esté de moda, sino porque se identifica con el mensaje.
El vestuario de Madres paralelas lo ha hecho Paola Torres, que ya trabajó con Pedro Almodóvar en La mala educación y Volver, pero no fue hasta Dolor y gloria cuando el manchego le encargó un ‘armario’ completo.
En la nueva cinta Pedro Almodóvar habla de moda de forma indirecta, y lo hace a través del trabajo de Janis. La lista de firmas que aparecen en la película es extensa. Están todas las marcas relevantes, desde Dior, Louis Vuitton, Prada, Giorgio Armani, Pertegaz, Palomo Spain y Missoni a otras más asequibles como Ecoalf, Levis e incluso Zara. Todos los armarios de las ‘Chicas Almodóvar’ son especiales, sobre todo el de Julieta. Ella solo vestía de Prada.
